Andorra busca modernizar su Ley del Juego
El Principado de Andorra se prepara para una transformación legislativa en el sector del juego, buscando armonía con su contexto económico y social. Esta revisión normativa, que incluye la modernización de las licencias y la integración de medidas de protección al jugador, busca impulsar la inversión, el turismo y la inclusión social.
Un proyecto de ley para el cambio
El Gobierno de Andorra, en una colaboración estrecha con el Consejo Regulador Andorrà del Joc (CRAJ), ha dado un paso significativo hacia la reforma del sector del juego con la presentación de un proyecto de ley que propone una revisión integral de la Ley de los Juegos de Azar.
Esta iniciativa, encabezada por el ministro de Finanzas, Ramon Lladós, y el director del CRAJ, Xavier Bardina, no solo busca una adaptación de la legislación a la realidad económica y social del país, sino que también pretende posicionar a Andorra como un destino de juego responsable y de clase mundial.
El proyecto de ley se centra en varios puntos clave. Por un lado, la introducción de una nueva clasificación de licencias de juego, que distingue entre licencias mayores y menores. Las primeras se otorgarán mediante concurso público para operaciones de gran escala como casinos y bingos.
Las licencias menores se subdividirán en puntuales y ocasionales para eventos únicos, temporales para periodos específicos, y específicas para actividades concretas de juego.
Además, con esta renovación, se busca la simplificación de los procesos administrativos para los operadores de juego y la implementación de un procedimiento sancionador más eficiente.
Por otro lado, el compromiso de Andorra con la integridad y la protección en el juego se refleja en la introducción de una prohibición de participación en juegos de apuestas para aquellos directamente vinculados a los eventos deportivos y competiciones.
Esta medida proactiva busca prevenir conflictos de interés y asegurar la transparencia y la equidad en todas las operaciones de juego. La nueva legislación establecerá un marco de confianza donde los intereses de los participantes estarán salvaguardados, y se promoverá una cultura de juego responsable.
Con estos cambios, el Gobierno aspira a atraer inversión extranjera, aumentar el turismo y generar empleo, mientras mantiene un compromiso firme con la prevención de la ludopatía y la promoción del juego seguro.
La propuesta legislativa también incluye la creación de un marco regulatorio más transparente y accesible, que permitirá a los operadores de juego entender mejor sus obligaciones y a los jugadores conocer sus derechos.
Además, se espera que la nueva ley facilite la entrada de innovaciones tecnológicas en el sector, lo que podría incluir plataformas de juego online y sistemas avanzados de seguridad y verificación.
Con este proyecto de ley, Andorra se prepara para dar un salto cualitativo en su oferta de ocio y entretenimiento, buscando un equilibrio entre el crecimiento económico y la responsabilidad social.
Balance y perspectivas futuras
Bardina presentó un informe detallado sobre las actividades realizadas en 2023, resaltando la instrucción de nuevas licencias que reflejan la evolución del sector en Andorra. La autorización del primer casino de juego ha sido un hito que ha marcado el comienzo de una nueva era para el entretenimiento y el turismo en el Principado.
La colaboración con el Cuerpo de Policía y la adaptación de normativas para la protección de datos personales han sido pasos fundamentales para asegurar un entorno de juego seguro y confiable. La implementación del expediente electrónico es otra innovación destacada que agiliza los procesos y mejora la eficiencia administrativa.
Mirando hacia el futuro, se anticipa que estas iniciativas continuarán fortaleciendo la infraestructura regulatoria y operativa del CRAJ. Con una visión clara hacia la sostenibilidad y la responsabilidad social, Andorra se prepara para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades que el futuro del juego pueda presentar.
Integración de servicios de la ONCE en Andorra
El Principado de Andorra está cerca de concretar un convenio con la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) , que permitirá a los residentes del país acceder a su amplia cartera de servicios.
Este acuerdo, que se encuentra en las etapas finales de negociación por parte del ministerio de Asuntos Sociales, promete ser un hito en el apoyo a personas con discapacidades.
El proceso de negociación, que ha estado en marcha durante varios años, incluye no solo la venta de lotería sino también un convenio social que, según el ministro de Finanzas, Ramon Lladós, es más significativo que cualquier beneficio económico que pueda derivarse.
Aunque la estructura económica del acuerdo está casi finalizada, aún se está definiendo el modelo de distribución, que podría inspirarse en el sistema de casetas utilizado en España.
La aceptación por parte de la ONCE de incluir a Andorra en su red de servicios es un paso sin precedentes que enriquecerá la red de apoyo social en el Principado.
Unnic, un símbolo de progreso y entretenimiento
En este sentido, el casino Unnic, inaugurado el año pasado, ha sido un éxito notable, contribuyendo a la visión de modernización que Andorra busca con su nueva legislación de juegos de azar.
Este centro de ocio integral no solo ha incrementado sus ingresos en un 7% sino que también ha reducido sus gastos en un 20% respecto al presupuesto inicial, incluso durante los meses de menor actividad turística.
Además de su impacto económico positivo, Unnic ha enriquecido la vida social y cultural de Andorra. Se ha establecido como un lugar de encuentro que promueve la interacción social y el intercambio cultural, ofreciendo una experiencia de ocio completa que trasciende el juego.
Su papel en el fortalecimiento del tejido social del Principado es un testimonio de cómo la industria del entretenimiento puede ser un catalizador de cambio y un complemento vital a las políticas legislativas.
Con una oferta que incluye gastronomía variada, espectáculos en vivo y la última tecnología en juegos de azar, Unnic se alinea perfectamente con la nueva legislación, demostrando que la regulación puede coexistir con el crecimiento económico y el entretenimiento de calidad.
La renovación de la Ley de Juegos de Azar en Andorra representa un paso adelante hacia la modernización y adaptación a las necesidades actuales del Principado.