El País Vasco destina 200 mil euros a la lucha contra la ludopatía
Las autoridades del gobierno abrieron la convocatoria para las organizaciones que se dedican a la prevención del juego patológico en el País Vasco. El plazo para la presentación de los proyectos vence el 19 de agosto. El Estado invertirá una fuerte suma en el desarrollo de esta área.
El País Vasco refuerza las medidas de juego responsable. ©ELG21/Pixabay
Subvenciones para la prevención del juego compulsivo
El proyecto del gobierno de Euskadi consiste en el financiamiento de entidades sin fines de lucro que dediquen su trabajo a la prevención de las adicciones relativas al juego. Esto forma parte de la agenda vasca en materia de apuestas, en especial a partir de la normativa más reciente, que data de febrero de este año. Las autoridades han endurecido las medidas que regulan la actividad, al tiempo que han tomado el sendero del fomento a las organizaciones de contención a las víctimas de la ludopatía.
Los subsidios a estas instituciones fueron aprobados a mediados del mes de julio, y el cierre para la presentación a la convocatoria es el 19 de agosto. El registro se realiza a través del sitio oficial del gobierno vasco y no supone un trámite particularmente complicado. Los receptores son los proyectos que esté encuadrados entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de este año. El Estado invertirá nada menos que 200.000 € en esta acción, que estará destinada a la prevención universal de la adicción al juego.
La prevención universal representa todas aquellas campañas que estén destinadas al público general de Euskadi. El objeto debe ser la promoción de la salud a partir de los datos que aclaren los riesgos del juego compulsivo. Así, se intentará difundir la información sobre el tema, al tiempo que se darán pautas para orientar a los usuarios de cualquier tipo de apuestas, sean online o físicas.
Detalles para obtener el subsidio al juego patológico
El gobierno vasco ha establecido pautas concretas para las entidades que deseen adjudicarse la subvención, conforme lo detallado en el Boletín Oficial de Euskadi. El principal objetivo debe ser detectar los casos de vulnerabilidad ante el juego, de modo que los sectores que estén en riesgo puedan ganar consciencia sobre la problemática. Esto abarca diferentes tipos de encuadres sociales, entre los que se destacan los menores de edad.
Asimismo, las campañas deben entregar información sobre el juego responsable, es decir, las prácticas correctas que hacen a las apuestas sanas. Así se logra visibilizar la actividad en su aspecto positivo, como herramienta lúdica y eje del entretenimiento. Las organizaciones también deberán divulgar datos relativos a las actividades y recursos que componen la lucha contra la ludopatía, tanto en el ámbito público como privado.
También se deberán difundir índices de situaciones de riesgo. Con esto, se intenta ganar cierta puntualidad en cuanto a los casos que pueden devenir en adicciones. Los indicadores de factores de riesgo son una de las claves de ese ámbito.
“Los fines estatutarios deberán promover el interés general, y podrán ser de carácter cívico, educativo, científico, cultural, deportivo, sanitario, de promoción de los derechos humanos, de asistencia social, de cooperación para el desarrollo, de promoción de la mujer, de promoción y protección de la familia, de protección de la infancia, de fomento de la igualdad de oportunidades y de la tolerancia, de defensa del medio ambiente, de fomento de la economía social o de la investigación, de promoción del voluntariado social, o de promoción y atención a personas en riesgo de exclusión por razones físicas, sociales, económicas o culturales.”
Las nuevas tecnologías también deberán estar incluidas en las campañas de prevención. El juego mediante casinos online y casas de apuestas deportivas en España ha crecido enormemente, y es una de las principales áreas de riesgo. Esto se debe a que las plataformas están disponibles en cualquier dispositivo electrónico, al alcance de toda la población desde cualquier lugar. Si bien los operadores cuentan con mecanismos de prevención y cuidado, las organizaciones sin fines de lucro tienen el compromiso de divulgar esas herramientas para que lleguen al público masivo.
Los proyectos de prevención de la ludopatía deberán estar orientados a audiencias puntuales, a saber: menores de edad, jóvenes, familias e instituciones educativas. Con esto, las autoridades vascas quieren asegurarse de que las campañas lleguen a los núcleos críticos de la sociedad. Al tener un espectro bien delimitado de llegada, la promoción se realiza de manera más eficiente.
El País Vasco, con su nuevo Reglamento General de Juego
A partir de febrero de este año las medidas se han vuelto más estrictas en Euskadi para las empresas de juego. Esto es la consecuencia de la aprobación del Reglamento General, que implicó nuevas políticas públicas. Lo más saliente de la normativa es la limitación de locales de apuestas, entre los que se cuentan los bingos y los casinos.
Así pues, la consecuencia inmediata de esta medida fue el cierre de 39 salas de juego en la región. Se trata, en efecto, de una tendencia a nivel nacional, promovida en diversos estratos del poder, desde el Ejecutivo español hasta las comunidades autónomas. La industria del juego no parece mostrar índices muy promisorios de crecimiento en este clima político.
