Nace la Asociación Española de Jugadores de Apuestas Deportivas
En España se ha formado una institución que aboga por los derechos y la representación de los jugadores ante las casas de apuestas y el Estado. Se trata de la Asociación Española de Jugadores de Apuestas Deportivas (AEJAD). Mediante un anuncio en sus redes sociales, esta entidad se dio a conocer en los medios nacionales, y trae propuestas llamativas.
Una organización para representar a los jugadores
El mes de diciembre trajo la oficialización de una nueva entidad en España. Se trata de la Asociación Española de Jugadores de Apuestas Deportivas (AEJAD), que nucleará a los apostadores de plataformas digitales en el país. La iniciativa tiene la intención de darle voz a las demandas, necesidades y sugerencias de los clientes organizados, tanto frente a las propias casas de apuestas como ante las instituciones de control del gobierno.
En el manifiesto de la entidad se lee una cierta disconformidad con el status quo de la industria de apuestas deportivas actual. Por un lado, la organización señala la falta de poder de negociación que tienen hoy en día los usuarios ante los términos y condiciones de los operadores de juego. Por otra parte, la AEJAD apunta contra las autoridades españolas, en especial la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), por no tener en consideración el rol de los jugadores en el circuito de las apuestas.
Así pues, esta nueva propuesta tiene un espíritu de cierta confrontación, no del todo ajeno a tintes de demanda. Según los impulsores del proyecto, en España no existía hasta el momento ninguna manera de reunir los intereses de los jugadores de casas de apuestas. A partir de ahora, existirá una vía institucional para aglutinar los reclamos y programar las iniciativas.
Si bien la AEJAD está en actividad en Twitter desde enero del 2021, su formalización administrativa se dio el pasado 16 de diciembre, casi dos años después de su comienzo de funciones. Según indicaron en su blog, tres días después, ya contaban con 100 socios. En efecto, España es un país que congrega a miles de aficionados a las apuestas deportivas, y el peso de esta entidad puede ser muy significativo si logra crecer.
El fin del silencio de los jugadores españoles
La entidad naciente se propone como la primera de su tipo en España. Será el proyecto pionero de aunar los intereses de estos actores fundamentales en la industria del juego: los clientes. Al ser los destinatarios de los servicios, y no los proveedores, es natural que su institucionalización llegue de manera tardía. Por tratarse de las apuestas deportivas, que están en franco crecimiento en todo el mundo, la contribución de la AEJAD será sin dudas significativa.
Como señalan desde el organismo, el sector del juego está organizado a través de su patronal de operadores digitales, Jdigital, al tiempo que cuenta con su aparato de comunicación. Las entidades de control también están estructuradas y cuenta con aparatos institucionales que trabajan por sus intereses en el mercado. Sin embargo, estos intereses rara vez coinciden con los de los jugadores.
Para los clientes de las casas de apuestas organizados, la DGOJ, que pertenece al Ministerio de Consumo, no pareciera moverse más que para fiscalizar y recaudar impuestos. Mientras que este año han tomado medidas de sanción contra una buena cantidad de plataformas de juego, no han atendido los reclamos de los usuarios para tener lo que es, a su mirada, un mecanismo de apuestas más justas.
Así pues, la AEJAD aclara que su lucha será contra el juego clandestino, que no brinda ninguna garantía de seguridad, pero también contra lo que llaman “los abusos de las casas de apuestas” ya instaladas en el mercado con licencia de la DGOJ. Los jugadores esperan tener más presencia en los términos y condiciones para poder sacarle el mayor fruto posible a sus predicciones. La negociación entre las distintas partes dará qué hablar en el país.
Borrando mitos sobre las apuestas deportivas
Desde la AEJAD también señalaron que pesan numerosos prejuicios sobre las apuestas en España. Por un lado, los miembros de la entidad tienen la impresión de que el conjunto social ve esta práctica como una suerte de patología de por sí, o bien como un camino hacia malos hábitos. La experiencia satisfactoria de muchos apostadores libres de adicciones muestra el plano contrario, y esa es la imagen que se quiere dar.
Por otra parte, la AEJAD hace referencia al perfil de jugador dócil y desinformado que le es más útil a las casas de apuestas. Según la flamante institución, los operadores de juego están a la busca de clientes que realicen sus predicciones sobre la base de corazonadas, sin medir las probabilidades ni interiorizarse con el deporte al que se apuesta. Por el contrario, se intentará formar apostadores con nociones claras sobre los riesgos y las oportunidades de la actividad.
La integridad en las apuestas deberá ser uno de los pilares del desarrollo, en vista de la cantidad de amaños que surgen a la luz en el deporte. Este año, la Operación Conífera puso el foco en el peligro de las apuestas deportivas cuando son el motor para la manipulación de resultados. La AEJAD no estará ajena a estas cuestiones.